Estamos así ante uno de los mejores y más caros terminales del mercado, el cual ofrece un panel Super AMOLED de 6.3 pulgadas con soporte HDR que debido al formato de 18,5:9 llega con una resolución Quad HD+ de 2960 x 1440 píxeles protegida por el laminado Gorilla Glass 5 y que se mueve mediante el SoC Exynos 8895, aunque para Estados Unidos y Asia, empleará el Snapdragon 835. En ambos casos, el SoC queda unido a 6 GB de memoria RAM unido a 64GB/128GB/256GB de almacenamiento interno ampliables mediante una tarjeta microSD de hasta 256 GB.
Esta pantalla queda engarzada en un chasis de aluminio de 162.5 x 74.6 x 8.5 mm de grosor, que pese a que ofrece dimensiones generosas, y un grosor mayor respecto a otros terminales de misma índole, debido a la incorporación de un Stylus S-Pen, que detecta 4096 niveles de presión, pero que ocupa una parte importante en el interior del dispositivo, es por ello que hay que conformarse con una batería de 3300 mAh que sabe a poco, pues terminales similares ya rondan los 4000 mAh, o que el propio Galaxy S8 ofrece más batería. Como era de esperar, queda respaldada de la tecnología de carga rápida para que al menos, pases menos tiempo esperando a su carga.
La información del Samsung Galaxy Note8 continua con el certificado IP68 que lo hace resistente al agua, tenemos lector de huellas dactilares a la espalda, escáner de iris, una configuración de doble cámara con un sensor de 12 MP F/.1.7 + telefoto de 12 MP F/2.4 con doble estabilizador óptico (OIS) capaz de capturar vídeo 4K, cámara frontal de 8 MP F/1.7, dispone de la conectividad 4G LTE Cat.16 (1000/150 Mbps), Bluetooth 5.0, WiFi 802.11ac, NFC, GPS + GLONASS + Galileo, se mantiene el conector jack de 3.5 mm , existe variante Dual SIM, y emplea el sistema operativo Android 7.1 Noutgat.
Samsung evitó mencionar el precio pese a que se lanzará mañana, pero los rumores indicaban 999 euros.